Posada y Garrido ambos tocan el cielo en una tarde oscura

Garrido y Posada salieron a hombros junto al mayoral de la ganadería

Foto: Jose A. Ledesma

El novillero Posada de Maravillas, que como sus otros tres compañeros de cartel debutaba con picadores en el coso Oliventino de la matinal feria de Olivenza, demostró su toreo e indultó un novillo de la ganadería de "El Juli" .


La plaza registró dos tercios de entrada en una mañana lluviosa. Ocho novillos de El Freixo, propiedad del torero Julián López, "El Juli", bien presentados y de muy buen juego en general, destacando la bravura del séptimo que fue indultado, pesando 460Kg.

Foto: Jose A. Ledesma

Abrió plaza Miguel Ángel Silva, que reaparecía tras la gravísima cornada que le infligió un eral hace cinco meses en Hoyo de Pinares. Pero este novillero no acusó ni las secuelas ni la inactividad derivadas del percance. Demostró que venía a por todas faltándole un toque para llegar a cuajar en los tendidos, lote deslucido y desrrazado que le tocó lidiar.
Miguel Ángel Silva: estocada tendida y descabello (oreja tras aviso); dos pinchazos (ovación).

Foto: Jose A. Ledesma

El novillo encastado del segundo, con el que Garrido puso y demostró su firmeza y valor, imprimió una buena tanda con la diestra de mucha sabor y torería, imponiendo sus buenas maneras. Le cortó las dos orejas
José Garrido: estocada trasera (dos orejas); estocada desprendida (oreja con petición de la segunda).

Con gusto, compás y cadencia templó a sus novillos Posada de Maravillas, la manera de llevar al toro y con la que imprimió una buena faena al primero de su lote, al que cortó las dos orejas.
El séptimo, un bonito, bravo y encastado novillo al que bordó el toreo al natural en varias tandas de muletazos para el recuerdo.
La fuerte petición de indulto para "Corremantas", era la mejor manera de poner el color a una tarde de cielos oscuros por la lluvia.
Posada de Maravillas: estocada desprendida (dos orejas); indulto (dos orejas y rabo simbólicos).

Foto: Jose A. Ledesma

Lama de Góngora, dejó impresos los detalles de su escuela sevillana. Un buen corte de mucho nivel, pero con falta de entrega hacia los tendidos. Manejó al novillo con mucha suavidad, y mucha entrega.
Lama de Góngora: estocada baja (oreja); tres pinchazos y estocada atravesada (silencio tras aviso).

Foto: Jose A. Ledesma

En cuadrillas destacó Manuel Larios con el capote y con las banderillas.



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